La modernización y la digitalización ya empezaban a ser bien acogidas por la industria del petróleo y el gas, pero las restricciones de la pandemia del Covid-19 impulsaron una aceleración en la adopción de una serie de nuevas tecnologías, que ha continuado desde entonces.

En la actualidad, la IA se considera un factor de cambio para el sector del petróleo y el gas, que se utiliza para reducir los costos operativos, mejorar la sostenibilidad y acelerar los procesos.

Según un estudio de mercado llevado a cabo por Mordor Intelligence, se espera que el empleo de la IA en el mercado del petróleo y el gas aumente a un ritmo del 10,81% entre 2022 y 2027.

También una encuesta reciente de Ernst & Young mostró que el 92% de las empresas de petróleo y gas de todo el mundo están invirtiendo en IA o tienen planes para hacerlo en los próximos 5 años.

A pesar de la acelerada adopción de las tecnologías de IA, el ritmo al que las empresas están adoptando la IA sigue siendo inferior a la velocidad a la que se está desarrollando y aplicando en otros sectores.

La IA podría aplicarse de diversas formas en la industria del petróleo y el gas, como para supervisar y mejorar la seguridad, aumentar el rendimiento operativo o proporcionar perspectivas y previsiones.

El uso de la IA podría mejorar significativamente la gestión de la cadena de suministro, con la posibilidad de reducir los errores entre un 20% y un 50%.

Esto se considera cada vez más importante tras las interrupciones de la cadena de suministro durante y después de la pandemia de Covid.

Los retrasos en la fabricación y entrega de componentes energéticos crearon un considerable retraso en la industria, y muchas operaciones experimentaron aumentos de costos y tiempo.

El empleo de la IA para gestionar los sistemas de la cadena de suministro podría ayudar a aliviar estas presiones en el futuro.

El uso de la IA en la industria del petróleo y el gas está aún en sus primeras fases, pero los beneficios potenciales son enormes. La IA tiene el poder de transformar el sector, haciéndolo más eficiente, seguro y sostenible.
A medida que la tecnología de IA siga desarrollándose, es probable que desempeñe un papel aún más fundamental en el futuro de la industria del petróleo y el gas.

Las nuevas tecnologías de IA también pueden ayudar drásticamente a mejorar las normas de seguridad, mejorando las prácticas ESG de las empresas y previniendo potencialmente catástrofes.

Una mejor supervisión de las plataformas de petróleo y gas podría ayudar a mejorar la seguridad de los trabajadores, mitigando aún más la posibilidad de que surjan problemas de salud y seguridad.

Esta tecnología también puede utilizarse para la vigilancia de oleoductos y otras infraestructuras con el fin de evitar fugas y vertidos de petróleo.
Esto podría ayudar a las empresas a ahorrar millones en pérdidas, así como a evitar daños importantes al medio ambiente.

Las principales empresas energéticas, como Shell, BP y ExxonMobil, son pioneras en aplicaciones de IA, mejorando desde los procesos de perforación hasta las medidas de seguridad.

Los líderes en IA

Hasta la fecha, algunas de las empresas energéticas líderes en la adopción de IA son Shell, BP y ExxonMobil. Shell ha introducido tecnologías de IA en toda su cadena de suministro de petróleo y gas, con más de 160 proyectos activos hasta mayo de este año.

Ha empleado estas tecnologías para reducir los costos de extracción de gas y automatizar los sistemas de perforación para ayudar a los operarios a comprender mejor el entorno.

La petrolera también está usando tecnología de IA en sus operaciones de energías renovables, para predecir la demanda variable de estaciones de recarga de vehículos eléctricos a lo largo del día y suministrar la energía adecuada.

Por su parte, ExxonMobil usa la IA para evaluar la viabilidad de una región para la perforación. En sus recientes operaciones en Guyana, la empresa empleó la automatización de bucle cerrado, que controla el proceso de perforación sin intervención humana.

El uso de esta tecnología ha permitido a los trabajadores de las plataformas desviar su atención a otras tareas importantes, ayudando a reducir la necesidad de que los ingenieros realicen tareas repetitivas que pueden ser gestionadas por máquinas.

Exxon también está usando la IA en sus operaciones de la cuenca del Pérmico, en Estados Unidos, para mejorar la eficiencia.

Por su parte, la británica BP se ha asociado con Microsoft desde 2017 para implementar sus soluciones en la nube Azure para mejorar los procesos de perforación, lo que ha llevado a una reducción del tiempo de perforación.

Desde entonces, BP se ha asociado con Bluware para emplear el aprendizaje profundo para mejorar la interpretación de los datos del subsuelo, eliminando la interpretación manual y lenta de los datos sísmicos.

La empresa también invirtió recientemente 5 millones de dólares en la financiación de serie A de la start-up Belmont Technology para mejorar las capacidades digitales y de IA de la empresa en su negocio Upstream.

Esto sigue a una amplia gama de otras inversiones en empresas de IA para mejorar la toma de decisiones. BP también ha puesto a prueba el robot Spot, impulsado por IA, en una de sus refinerías, utilizando el robot para recopilar datos, detectar anomalías y emisiones, y sacar a los trabajadores de situaciones potencialmente peligrosas.

Las tecnologías digitales innovadoras, como la IA, se están volviendo vitales para el funcionamiento de las operaciones de petróleo y gas, ya que se usan para reducir tiempos y costos, así como para mejorar la seguridad de los trabajadores y del medio ambiente.

Cada vez son más las empresas, grandes y pequeñas, que están dispuestas a adoptar la tecnología de IA, sobre todo a raíz de los retos a los que se enfrentaron durante la pandemia de Covid.

Sin embargo, el despliegue de la tecnología de IA más actualizada sigue siendo deficiente en el sector energético, con un importante margen de mejora.