Since Washington temporarily eased oil sanctions on the country last month, PDVSA has been allocating spot cargoes of crude and fuel oil through little known firms that contract with trading companies, which ultimately deliver to refiners.
PDVSA and Italy's Eni (ENI.MI), one of its joint venture partners, have been producing and storing about 2,000 barrels per day of Corocoro medium crude at a floating storage and offloading (FSO) facility.

The last export of Corocoro was in 2021, also from storage and to an Asian buyer, according to shipping and PDVSA data. Before U.S. oil sanctions were first imposed on Venezuela in 2019, the United States was the primary market for the crude.

PDVSA and Eni did not immediately reply to requests for comment.

This year, PDVSA and Eni have expanded trade as part of a U.S-authorized oil swap deal to pay off outstanding debt. They separately have engaged in talks to revive output at the shallow water offshore project where the Corocoro crude is produced, Golfo de Paria Oeste. A final agreement has not been signed.

Getting access to crude stored at the FSO is expected to bring some operational challenges due to its dilapidated condition and the possibility of some of the oil being off specification, especially due to water content.

The crude on offer would be discharged to barges and then transferred to a receiving vessel, the sources said.


PDVSA de Venezuela ofrece cargamento de crudo Corocoro a través de intermediario -fuentes

La petrolera estatal venezolana PDVSA está ofreciendo vender hasta 1 millón de barriles de crudo Corocoro a través de un intermediario, dijeron fuentes el miércoles, lo que podría convertirse en la primera venta de ese grado en dos años.

Desde que Washington levantó temporalmente las sanciones petroleras al país el mes pasado, PDVSA ha estado asignando cargamentos spot de crudo y fuel oil a través de firmas poco conocidas que contratan con empresas comercializadoras, que en última instancia entregan a las refinerías.

PDVSA y la italiana Eni (ENI.MI), una de sus empresas conjuntas, han estado produciendo y almacenando unos 2.000 barriles diarios de crudo medio Corocoro en una instalación flotante de almacenamiento y descarga (FSO).

La última exportación de Corocoro fue en 2021, también desde el almacenamiento y a un comprador asiático, según datos de transporte marítimo y de PDVSA. Antes de que se impusieran por primera vez las sanciones petroleras estadounidenses a Venezuela en 2019, Estados Unidos era el principal mercado para el crudo.

PDVSA y Eni no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.

Este año, PDVSA y Eni han ampliado el comercio como parte de un acuerdo de canje de petróleo autorizado por Estados Unidos para pagar la deuda pendiente. Por separado, han entablado conversaciones para reactivar la producción en el Golfo de Paria Oeste, el proyecto marino de aguas poco profundas donde se produce el crudo Corocoro. Aún no se ha firmado un acuerdo definitivo.

Se espera que el acceso al crudo almacenado en la FSO plantee algunos problemas operativos debido a su estado ruinoso y a la posibilidad de que parte del petróleo esté fuera de especificación, especialmente por su contenido de agua.

Según las fuentes, el crudo ofertado se descargaría en barcazas y luego se transferiría a un buque receptor.